UNIDAD EN EL AMOR

Rodolfo Acosta Chacón
Evangelizador
LA UNIDAD EN EL AMOR

Muchos hombres, y sobretodo las mujeres se preguntan ¿Cómo ser buenos padres?. Es una tarea difícil, que conlleva a mucha formación y no sólo al cariño o al amor. Una tarea que solo con la ayuda de Cristo podemos realizar.

Esta labor puede resultar muchas veces desalentadora cuando existe en un hogar la desunión o solo uno de los padres busca a Cristo. No te desesperes en cuanto un solo padre quiera educar a su hijo en la disciplina del Señor, lo conseguirá. Desde luego se torna todo un reto cuando se tiene que luchar por educar a un hijo cuando hay actos inapropiados de uno de los dos progenitores.

1.- ¿Tu familia está comprometida con Cristo? _______________
2..-¿ Sólo uno de los dos busca la orientación del Señor?____________
3.- ¿Eres tu el que pone los malos hábitos o es tu conyugue.?_________

Cual sea tu caso, ánimo Dios no desampara y El es el cuidador de padres y madres solos y de los niños de hogares rotos. (Salmo 68,5) El es amigo del que no tiene amigos. Tu como padre solo recurre a su misericordia y refúgiate en su gran bondad.

Ciertamente un hogar monoparental no es la idea de familia para Dios y la importancia del Padre a quedado muy clara en el Antiguo Testamento donde si una mujer quedaba viuda, tenía que casarse con el pariente mas próximo (Deuteronomio 25,5). Por ende la familia modelo en la Biblia comprende la presencia de ambos, papá y mamá en sumisión a Dios, impulsados a trabajar en cooperación por su mutua entrega del uno al otro, con un profundo amor centrado en Cristo como el adhesivo que lo une todo.

En nuestro días vemos que las familias se centran más en los hijos. Todo gira en torno a los niños, las actividades de los niños, los estudios de los niños, las relaciones de los niños y sus interesen tienden a determinar el programa de la familia. Dios y su designio es que la familia sea centrada en Cristo, luego centrada en el matrimonio, teniendo la relación marido-mujer la prioridad sobre todas las demás relaciones en el hogar y determinando los padres y no los hijos el programa de la familia.

San Pablo patrono de nuestra comunidad nos enseña el orden de la familia en las siguientes citas bíblicas:

Col. 3,18-21 y Efesios 5, 22; 6,4

* Casadas, estad sujetas a vuestros maridos (Col. 3,18; Ef. 5,22-24)
* Maridos, amad a vuestras mujeres (Col. 3,19; Ef. 5,25-33)
* Hijos, obedeced a vuestros padres (Col. 3,20; Ef. 6,1-3)
* Padres, no exasperéis a vuestros hijos (Col. 3,21; Ef. 6,4)

Queda claro que San Pablo en estos dos pasajes establece el designio
de Dios acerca de cómo debe ordenarse la familia.



La instrucción del Apóstol Pablo es sencilla para los maridos:
Amen a sus mujeres. Ámelas como Cristo amó a la Iglesia. Cuídenlas. Hónrenlas. Sírvanlas. Guíenlas. Usted marido es la cabeza de las esposa en el mismo sentido que Cristo es la cabeza de la iglesia.

Si le preguntamos a muchos esposos y a ti:

¿Cuál es la responsabilidad Bíblica que tienen que cumplir?

Cual sería la respuesta.

Todas se encerarían en una: "liderazgo de Amor"

EL SIGNIFICADO DEL AMOR

El designio de Dios para el marido es el liderazgo, de eso no hay duda. Pero es un liderazgo que procede del amor y que esta atemperado por un tierno y solícito afecto. Es desde luego que el marido es cabeza del hogar. Pero la condición de “cabeza” en el sentido bíblico no significa necesariamente autoridad. No es la mentalidad “vieja tráigame las chancletas”. No es la actitud de ser “El Rey y Señor de la casa”. No es así, como maridos no tienen que ser un “Miserable Tirano”. Este papel de cabeza como amante y proveedor queda mejor reflejado en Cristo, que asumió el papel de siervo para lavar los pies de sus discípulos.

El papá cristiano debe de mostrar amor a su esposa en sujeción. Debe estar caracterizado por la gentileza, la ternura y el servicio. Es un amor humilde y servicial, como el de Cristo.

En esta lectura de Efesios 5 tiene que ver con lo que significa estar llenos del Espíritu Santo. El versículo 18 dice: “No os embriaguéis con vino, en lo cual hay disolución; antes bien sed llenos del Espíritu. Ser llenos del Espíritu no se simboliza como embriagados, como una persona que pierde el control de sus facultades, que actúa de manera imprevisible, que se ría a carcajadas, o cosas de estas. La Biblia no muestra una conducta llena del Espíritu como descontrolada o estridente.

Una persona llena de vino está literalmente controlada por el vino. Por así decirlo “bajo su influencia”. Del mismo modo una persona llena del Espíritu esta bajo el control y la influencia del Espíritu. Todos su actos, pensamientos y el trato a los demás quedan gobernados y conformados por el control del Espíritu Santo.

Y ¿Cómo es la conducta controlada por el Espíritu? Leamos Ef. 5, 19-21.

Existe primero un sentido de reciprocidad que se repite. Comienza hablando “Hablando entre vosotros” y acaba con “someteos unos a otros” En medio nos describe una alma que está en armonía con Dios y que está totalmente agradecida por cada giro de la providencia. En otras palabras nos habla de una persona que habla para edificar, que canta alabanzas a Dios desde lo profundo de su corazón, que da gracias a Dios por todo, y que se sujeta a otros en el temor de Dios.